El vehículo autónomo y otros fenómenos disruptivos acabarán afectando a la posventa especialista en vehículo industrial, aunque no será en el corto plazo. Así, lo ve al menos, Santiago Barco, Director Técnico y especialista de VI en Montcada Artículos Técnicos, empresa ligada desde 1994 a la suspensión, y más en concreto a la suspensión neumática, inicialmente para vehículos industriales de gran tonelaje, y ahora también para turismos, con instalaciones en Lliçà de Vall (Barcelona), Massanassa (Valencia) y Villaverde (Madrid). Barco, que prevé que el cliente del taller de V.I. será cada vez más exigente, señala otros retos para el sector.
La mayoría de operadores del sector señalan que el mercado del vehículo industrial vive unos años de crecimiento, una tendencia que no se ha roto en 2018 y que, a juicio de Santiago Barco, Director Técnico y especialista de VI en Montcada Artículos Técnicos, tampoco se romperá en 2019, pese a que la situación en general “es inestable”.
Barco sostiene esta previsión de “mantener los objetivos de crecimiento, dado que no prevemos grandes cambios en la renovación del parque”. Un parque cuya media de edad se sitúa en 12,5 años en el caso de los vehículos comerciales ligeros y en 14 años en el caso de los industriales, según la asociación de fabricantes Anfac.
Parque y cambios tecnológicos
Mientras el mercado de V.I. convive con esta realidad —no en vano, en 2018 se vendieron hasta noviembre 347.796 vehículos industriales usados frente a las 242.058 unidades nuevas en todo el ejercicio (de enero a diciembre)—, el sector se prepara para la llegada de diversos ‘fenómenos disruptivos’ que afectarán a la movilidad de pasajeros y mercancías.
No obstante, el Director Técnico y especialista de VI en Montcada Artículos Técnicos considera que su impacto real se ve “aún lejano». «No creemos que en los próximos años sea un factor determinante que llegue a afectar de una forma tan directa a la reparación y mantenimiento de los vehículos industriales. De todas maneras, sí entendemos que, en un futuro, más a largo plazo, todos estos cambios tecnológicos acabaran llegando al sector”, señala.
Y para prepararse para el futuro (incluso, para el presente), Santiago Barco apunta que “el taller ha de ir hacia la especialización y, en consecuencia, formarse para ello, e invertir tanto a nivel humano como de equipamiento” para garantizar su eficiencia en las intervenciones y la rentabilidad de su negocio.
En cuanto al cliente del taller de V.I., Santiago Barco coincide en señalar que éste cada vez “será más exigente”. Además, continúa Barco, “ante las constantes innovaciones tecnológicas, y dependiendo del tipo de intervención, éste será muy selectivo a la hora de elegir a qué taller acude”.
Asimismo, el Director Técnico de Montcada Artículos Técnicos pone el foco en una variable en auge: el renting por parte del constructor. “Hasta ahora se aplicaba sólo en la cabeza tractora, pero de un tiempo a esta parte también se utiliza para el semirremolque y este condicionante es obvio que influye de forma importante en el sector”, concluye.